Este libro aborda la relación entre estos dos conceptos, buscando superar los modelos tradicionales de normalización y compensación y enfocándose en una línea de análisis pedagógico central para diseñar procesos educativos inclusivos para estudiantes con discapacidad. Su objetivo es ofrecer herramientas pedagógicas que permitan una educación que valore las capacidades de cada alumno, evitando un reduccionismo psicologista.